A solicitud nuestros redactores se hacen cargo de su proceso de redacción. A menudo resulta muy complicado cualificar a un redactor propio con menos de 20 manuales de instrucciones por año.
Gracias a su amplia experiencia nuestros cualificados colegas muchas veces son tanto más productivos que un redactor interno que, además, debe realizar otras actividades en la empresa.
Y para evitar dependencias, el cliente puede adoptar el proceso de redacción y continuarlo por si mismo en cuanto lo desee.